Grandes esculturas de Barcelona

Barcelona es una ciudad de arte, tanto en sus museos como en sus calles. La libertad de expresión y el orgullo en su historia forman parte intrínseca de la cultura catalana. Hubo un tiempo en que la mayor representación como país fueron sus artistas, que representaban y se exhibían a través de sus múltiples obras públicas.

La pasión y el amor que los artistas mostraban en sus exhibiciones era la mejor representación del compartir artístico con la ciudadanía que se podía tener.  

Hoy en ShBarcelona os mostramos algunas de las mejores esculturas públicas de Barcelona y algunas de las piezas que definen la liberación cultural de Barcelona.

Golden fish

El arquitecto canadiense- americano Frank Gehry añade esta obra a su extensa trayectoria de esculturas de arte y edificios que ha creado en su increíble carrera como arquitecto. 

Él es el creador de muchos otros edificios y obras de igual impacto alrededor del mundo, El museo de Guggenheim en Bilbao es considerado uno de los mejores y más impactantes edificios de la historia de la arquitectura.

La escultura del golden fish, fue construida como parte de la remodelación de la ciudad para los Juegos Olímpicos de 1992 y está ubicada a lo largo de la costanera del Puerto Olímpico, junto a la torre Mapfre y al hotel Arts. 

Mide 35 x 45 metros y está construída de piedra, acero y cristal. Es una construcción contemporánea en un espacio único que representa la nueva Barcelona. 

El cap de Barcelona

El artista pop estadounidense Roy Lichtenstein diseñó una colorida y vívida representación de la cabeza de una mujer en arte pop. Esta escultura también fue realizada para los Juegos Olímpicos de 1992, cuando Lichtenstein creó esta espectacular obra de una de las obras de Gaudí.

Lichtenstein recreó el famoso procedimiento de Gaudí de triturar los azulejos y unirlos en varias formas, contribuyendo a su aspecto surrealista. Esta fue la primera escultura hecha de baldosa de cerámica exterior de Lichtenstein y podría decirse que fue su mejor trabajo en 3D.

Casi a 20 metros de altura, se encuentra al final del Passeig Colom frente a la oficina de correos, la “cabeza”. Una escultura de labios rojos, pestañas gruesas y el “cuello” amarillo, azul y negro, una verdadera representación del renacimiento de Barcelona en una nueva era de prestigio en el mundo entero.

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Dona i Ocell

El escultor Joan Miró construyó esta obra justo antes de su muerte como una bendición para una nueva Barcelona que acababa de salir de los 40 años de dictadura. 

Junto a artistas como Dalí y Picasso, la extensa obra de Joan Miró es reconocida como una de las más inspiradoras del siglo XX. 

La escultura de la “Mujer y el pájaro” la podemos encontrar de pie en un estanque poco profundo, a 20 metros de altura detrás del Centro Comercial Las Arenas en Plaza España, dando la bienvenida a los visitantes a la ciudad.

Si nos acercamos podemos diferenciar los colores entrelazados hasta la cima, en el que se representa la unión de la vida y la muerte en la forma de una mujer y un pájaro.

Por otra parte, la palabra catalana ocell es también un apodo para el pene de un hombre, lo que refleja su naturaleza fálica. 

Es una pieza provocativa que podría ser interpretada como un acto de liberación del viejo régimen dictatorial y de avance hacia una sociedad con libertad de expresión sexual.

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El Gat del Raval

El Gato del Raval, tal y como está traducido, fue realizado por el artista colombiano Fernando Botero. Se asentó en Barcelona por primera vez en 1987, pero  la escultura tuvo que ser trasladada dos veces antes de instalarse en el Raval; ya que por alguna razón, no se pudo quedar en su localización original, el Zoo.

Esta escultura se asienta finalmente en el 2003 y simboliza el cambio radical del barrio del Raval. Ha pasado de ser conocido por sus escenas de robos y prostitución a la zona de moda y atracción turística que actualmente se está convirtiendo.

A muchas personas les gusta detenerse y tomar una copa junto al gato y su cuerpo orondo. Botero es conocido por crear obras y figuras exageradas en tamaño, en tono de crítica humorística.  El Gat del Raval no es la única escultura del escultor colombiano en España, podemos disfrutar algunas de sus obras con la maternidad en Oviedo y Caballo con Bridas en Bilbao.

Barcelona es una ciudad que se enorgullece de impresionar al público de diferentes maneras, incluyendo sus esculturas. Mezclar lo nuevo con de lo viejo desafiando la suposición de lo que es arte en una contraposición de ideas tradicionales y contemporáneas que se exhiben en pleno espacio público.

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