Durante la Guerra Civil, Barcelona fue duramente castigada por la aviación italiana y alemana. Era la primera vez que se atacaba de forma continuada sobre población civil, por lo que era necesario hacer frente a una situación desconocida hasta entonces. Los ataques sobre la ciudad eran constantes y, para protegerse, las autoridades catalanas encargaron a Ramon Perera idear la forma de resguardar el máximo número de vidas humanas. Finalmente, se ideó crear una serie de refugios bajo tierra, a los cuales acceder desde la calle o cualquier edificio. Así nacieron los refugios antiaéreos en Barcelona.
Pero no se trataba solamente de cavar un espacio bajo tierra para protegerse. Había que diseñarlos de tal forma que aguantaran la fuerza de las bombas y la onda expansiva de la metralla (de aquí que las entradas fueran en forma de “s”). Aunque desde dentro de los refugios se podía escuchar el ruido de las bombas al impactar con el suelo o un edificio, eran estructuras muy seguras que no cedieron en ningún momento. Se estima que se construyeron unos mil cuatrocientos refugios antiaéreos en Barcelona, gracias en gran parte a la gran colaboración en su confección por parte de la población. De aquella época, actualmente, aún se conservan algunos refugios; desde ShBarcelona recomendamos su visita. Gracias a ello, es posible conocer de primera mano cómo eran.
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Los refugios antiaéreos
Refugi 307
Sse encuentra situado en el barrio del Poble Sec, en la calle Nou de la Rambla, 307. Entre lunes y sábado, solamente es posible la visita en grupos, en cambio, durante el fin de semana, se pueden realizar visitas guiadas. En todos los casos, es imprescindible la reserva previa. Se trata de un refugio que cuenta con unos 400 metros de túneles, con una altura de 2,10 metros y una amplitud que oscila entre los 1,5 y 2 metros. Durante la visita, es posible ver las distintas partes del refugio: los lavabos, la fuente, la enfermería, la sala para niños o la cocina.
Refugi de la plaça del Diamant
Se encuentra en la misma plaza que da nombre al refugio, en pleno centro de Gràcia. Está construido a 12 metros bajo tierra y tenía una capacidad para unas 200 personas, con unos 250 metros de túneles. Una de las fábricas próximas al lugar alertaba con el sonido de una sirena de la llegada de la aviación. Era entonces cuando los vecinos corrían allí a refugiarse.
Refugi de la plaça de la Revolució
Es otro refugio de Barcelona que se puede encontrar en el mismo barrio de Gràcia. En este caso, es más complicado de acceder y las visitas que se hacen son más esporádicas consecuencia de su mal estado de conservación y la alta humidad que hay en el camino.
Refugi del Palau de les Heures
Es un espacio que se encuentra en la misma falda de la montaña de Collserola, en la cual el mismo President Companys se resguardó para escapar de los ataques aéreos. Su propietario, Josep Gallart (que dio su apoyo al golpe de estado franquista), dio las coordenadas del lugar a la aviación alemana para que bombardearan su propia casa por la presencia de Companys. Para aumentar su protección, en el subterráneo, se construyeron un refugio de unos 40 metros de longitud y 2,15 metros de altitud. Ahora mismo, su propiedad está en manos de la Diputación de Barcelona, que es la que acepta o desestima las peticiones de visita.
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