Aunque el arte religioso o la arquitectura no sean tu punto fuerte, hay tres puntos de la ciudad de Barcelona que no puedes dejar de visitar. Tanto si estás de turismo como si has realizado un alquiler de pisos por días en Barcelona por motivos de negocio, estos tres puntos son un “must”, incluso en una visita express con poco tiempo para conocer la Ciudad Condal. Cuando te encuentres contemplando sus fachadas, admirando sus cúpulas con la cabeza hacia arriba y apreciando su grandiosidad entenderás nuestra insistencia.
– Catedral de Barcelona (“Catedral de Santa Eulalia de Barcelona”). Un gran ejemplo del Gótico Catalán. Está edificada sobre una antigua catedral de estilo románico. En el siglo XIII, en pleno auge del gótico, se empezó a construir la actual basílica, cuya construcción duró casi tres siglos. Está muy cerca del centro histórico de Barcelona, cerca de la famosa Plaza Sant Jaume, donde se encuentra el ayuntamiento y se proclamó la autonomía de Cataluña. Un alquiler de pisos en Barcelona en esta zona es buena idea si quieres estar cerca del centro, concretamente de la zona que queda entre la derecha de las Ramblas y la Via Laietana. La propia plaza situada frente a la Catedral es un punto de encuentro, terraza de bares, lugar de espectáculos ocasional y lugar de instalación de mercadillos ocasionales, como el tradicional de Navidad cuando se acercan estas fechas. Curiosidad: ¡Tiene su propia web!
– Catedral del mar (“Santa María del Mar”) : hay un best-seller que ha hecho especialmente famoso este templo en los últimos años. La obra de Ildefonso Falcones “La Catedral del Mar”, ambientada en los tiempos en los que un humilde grupo de pescadores de la ribera pusieron en marcha el proyecto de construir su propia catedral, ha renovado el interés por un edificio que ya era asombroso de por si. Al igual que la Catedral de Santa Eulàlia, es Gótica. A diferencia de ella, se encuentra más escondida. La Catedral de Barcelona prácticamente te la tropezarás caminando por el centro. Para encontrar la Catedral del Mar tendrás que callejear por los estrechos viales del antiguo barrio de la Ribera. Una buena referencia puede ser la Estación de Francia, ya que no se encuentra lejos de ella. El interior, con sus alta columnas y bóvedas coloreadas, os soprenderá, ya que por fuera tiene un aspecto mucho más aséptico.
Disfruta de esta pequeña ruta que te servirá de introducción perfecta a los secretos arquitectónicos de la ciudad.
gracias Damien! has sido muy concreto en dar tus explicaciones. TE felicito! Allá vamos Barcelona!