Los pisos de la Ciudad Condal suelen tener precios elevados, teniendo en cuenta que el sector inmobiliario a mejorado mucho en los últimos años.
Los inmuebles de segunda mano generalmente tienen algunas desventajas en contraste con los de obra nueva, entre ellas se encuentra el estado del piso. Así, comprar un piso para reformar en Barcelona es una excelente inversión.
Si bien muchas personas asumen que tienen que reformar cuando compran una casa, otras son muy reticentes a tener que hacer obras, ya sea por el tiempo que estas requieren para finalizarse o por las necesidades inmediatas de traslado que algunos perfiles de compradores necesitan.
Dejando de lado estos últimos, lo cierto es que reformar una vivienda tiene muchas ventajas.
Cuando invertimos en un piso, lo normal es que nos fijemos en algunos detalles para decidirnos a dar el paso. Estos suelen tener que ver con:
La mayoría de ellos no tienen posibilidad de cambio o es muy complicado, como es el caso de la zona, el tipo de vecindario, la orientación del piso, la luminosidad, las comunicaciones o que se trate de una zona comercial o no.
Pero, por el contrario, no es complicado que podamos cambiar la distribución o el estado de un inmueble con una remodelación.
A veces encontramos el piso ideal, alto, con ascensor, luminoso, en un buen barrio, bien comunicado… en ese caso, invertir en un piso a reformar es una excelente opción ya que probablemente ese inmueble valga mucho más una vez reformado y recuperemos con creces lo invertido.
En Barcelona existe una importante bolsa de pisos de excelentes características cuyo único hándicap es el estado interior del inmueble.
Por poner un ejemplo, en zonas cuyas construcciones son más antiguas, como es el caso de la Barceloneta, podemos encontrar pisos a reformar con vistas al mar que, una vez reformados, serán excelentes candidatos para el alquiler turístico.
En otras ocasiones, nos encontramos con casa bajas en barrios de la zona alta de Barcelona, cercanos al parque de Collserola, que reformadas se convierten en viviendas unifamiliares excelentes, con jardín trasero y relajante tranquilidad.
Lo más importante en estos casos es valorar claramente lo que se busca y necesita, las cosas que no se pueden cambiar (o que no dependen de nosotros) y el potencial principal del inmueble.
Si bien es importante tener en cuenta que las obras de un piso pueden ser un inconveniente para algunas personas, lo cierto es que, por lo general, suelen reportar muchos beneficios una vez finalizadas.
Por ejemplo, dejaremos el piso como nos gusta a nosotros, y podremos escoger materiales, calidades y precios en función de estas.
Si encontramos una empresa de reformas de pisos en Barcelona seria y profesional, nos aconsejarán y darán ideas en las que no habíamos pensado que pueden mejorar mucho el resultado final.
Puede también encontrar otros estilos de pisos en Barcelona bajo estos criterios: